El hijo de Bruce Lee y Linda Emery aprendió a conectar patadas laterales a los cuatro años de edad. Su padre murió cuando tenía solamente 8 años, lo que lo llevó a crecer como el hombre de la casa.
Aunque Brandon Lee comenzó su carrera como modelo, rápidamente viró hacia la actuación. Rodó 7 películas antes de la última, la que lo llevaría a ser recordado por siempre: The Crow (El Cuervo), donde interpretó a Eric Draven.
El 31 de marzo de 1993 y durante la etapa final del rodaje de la cinta, dirigida por Alex Proyas y basada en el cómic homónimo de James O’Barr, Brandon Lee murió accidentalmente cuando una de las pistolas utilizadas para las escenas fue detonada en su contra, conteniendo balas reales. Tras rodarse la escena, Lee no se levantó del suelo, muriendo más tarde en el hospital.
En la escena en cuestión, el protagonista recibía un disparo de uno de sus personajes antagónicos, Funboy. Sin embargo, el revolver utilizado contenía balas, gracias a que previamente se había rodado un primer plano de él, mostrándolo cargado. Debido a cuestiones de presupuesto, se compraron balas reales para dichas tomas en primer plano, y recién se había despedido al maestro armero que estaba encargado de revisar las armas.
La película, que ya estaba casi completamente terminada, concluyó su rodaje utilizando un doble y efectos digitales. Se convirtió con el paso del tiempo en un filme de culto, además de que lo sucedido generó una enorme leyenda alrededor de la personalidad de Brandon, quien fue enterrado junto a su padre en Seattle, Washington, en el cementerio Lake View, Capitol Hill.